BUENOS MODALES PARA UNA POETA SUBVERSIVA

Dicen que hay que callar
para tener amigos
decir lo menos en el peso de la vida,
andar con pies de andamio,
y encantar, equilibrar los amores,
decir sin furia y sin pasión
nada que arda en la memoria...

Me han recomendado que el verso sea tenue, suave
un casquete sin pólvora
una dama hermosa
una voz estentórea, cuál vampiro Don Juan,
o una pose acertada y sinuosa
una portada pues, una pipa, un asiento bonito,
un arquetipo para la posteridad.

Me han propuesto que deje en ataúd
a mis vencidos
que no tome sus sangres por escritura
que no llore fuerte
porque espanto a las fortunas
que no enrede con mis suspiros por justicia
el blanco manto del papel
y que sea amiga, sea cómplice.

Me han dicho que soy inquebrantable
pero no, sólo estoy herida
estoy quebrada
y es que en mis hebras de piel
se han sembrado voces.

Dicen que hay que callar
porque a la vanidad
les espantan los espejos
le cantan los mariachis de la soledad y el fracaso.

Vayan en paz
que yo estaré aquí
pintándole los cuerpos
a sus versos...